Me he reunido con la Asociación Cántabra de Empresas Productoras de Artes Escénicas (ACEPAE) para conocer sus necesidades.
Después de escucharles, y ante la dificultad de gestionar un teatro con cuatro escenarios diferentes, creo que es necesario crear un Teatro Municipal que se podría ubicar en el Edificio del Banco de España, un edificio que considero se debe convertir en un centro cultural de primera magnitud. El Teatro debe estar gestionado desde un organismo independiente y no para que lo gestione el Ayuntamiento en función de sus necesidades.
Buscando una solución a corto plazo para este problema, apuesto por armonizar los cuatro escenarios, para que las diferentes empresas escénicas tengan presencia en cada uno de ellos de manera fluida y continuada. He transmitido a ACEPAE mi compromiso de que el territorio de escenarios de Santander forme parte de un todo, para después plantear una estrategia, analizar los recursos de los que se dispone y hacer una planificación. Asegura que esto es posible teniendo una voz gestora legitimada a través de un organismo autónomo.
Por otro lado, les plantee la necesidad de acompañar institucionalmente la promoción de las empresas de artes escénicas en ferias y eventos fuera de Cantabria como ocurre en cualquier otro sector. En el caso de las artes escénicas existen particularidades con respecto a otras empresas culturales como la búsqueda de sinergias, itinerarios, circuitos en Cantabria y fuera como desarrollo de lo local.
El modelo de gestión para activar un proceso de participación y estrategia cultural no es el que se está llevando a cabo por parte del Ayuntamiento con su política de Fundaciones, un ejemplo lo encontramos en la de 2016, de la que no ha quedado nada porque no existe una estrategia cultural en la ciudad. Sin esta estrategia tampoco funcionará Santander Creativa ya que, además, tampoco cuenta con la participación de agentes culturales
De momento, la cultura es un hábito que no se genera ni fomenta en Santander. Hay que cambiar este aspecto y lo podemos conseguir desde los centros cívicos y desde el planteamiento de una buena planificación, así, los ciudadanos participarán activamente en la cultura y no como espectadores pasivos.
También les he transmitido mi compromiso de que, cuando pasen las elecciones, continuaré manteniendo reuniones periódicas con los agentes culturales con el fin de conocer sus necesidades en cada momento porque la comunicación no puede ser algo inusual desde el Ayuntamiento que, hasta ahora ha estado de espaldas a la cultura.
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